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Mostrando las entradas etiquetadas como travesti

Travistiendo a mi primo

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Juan entró en el cuarto de su primo Demian, mirando alrededor con curiosidad. Era un cuarto típico de adolescente, con pósters de bandas y deportistas en las paredes y un escritorio desordenado en un rincón. —¿Qué pasa, primo? —preguntó Juan, acercándose a la cama donde Demian estaba sentado, jugando con su teléfono. Demian levantó la vista y sonrió. —Nada, nada. Solo jugando un poco. ¿Y tú? —respondió. —Nada, solo pensaba en ti —dijo Juan, sonriendo con picardía. Demian se ruborizó ligeramente y bajó la vista hacia su teléfono. —¿De qué manera? —preguntó, intentando sonar indiferente. Juan se sentó en la cama a su lado y lo miró con curiosidad. —Bueno, te has dejado crecer el pelo, primo. Estás empezando a parecer una chica —dijo Juan, acariciando suavemente el cabello largo y rubio de Demian. Demian se rió incómodo y se alejó un poco. —¿Qué dices? ¡No es cierto! —protestó. —Sí, sí lo es —insistió Juan, sonriendo—. Pero no te preocupes, te queda bien. De hecho, creo que podrías pasar ...

Barbara, cap 2

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  Claudia regresó del trabajo y ya tenia una mirada de lujuria. "Hola Barbara", dijo ella mientras se aproximaba a mí. "Estoy frita. Camine todo el dia...  me harias un pete de pies?" Yo asentí y me arrodillé ante ella. Comencé a besar cada dedo de sus pies con suavidad, sintiendo cómo mi cuerpo se excitaba por su aroma. "Estás muy guapa Barbara", dijo Claudia mientras yo seguía besando sus pies. "Me encanta cómo te ves maquillada y vestida bien de putita." Yo seguí besando cada dedo de sus pies con suavidad, sintiendo cómo mi pene comenzaba a endurecerse. Claudia lo notó y sonrió. "Te calienta, Barbara?", susurró ella en mi oído mientras me apretaba las nalgas con suavidad. Yo asentí sin decir palabra, sintiendo cómo mi cuerpo se excitaba por sus caricias. "Chupame la concha", dijo Claudia mientras se quitaba la ropa. Yo asentí y comencé a besar su vulva con suavidad, sintiendo cómo su clítoris se endurecía al tacto de mi len...

Perdiendo a mi novia: Barbara

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Después de todos los eventos que habían ocurrido, yo decidí visitar a mi esposa para intentar convencerla de que no se divorciara de mí. Yo sabía que iba a ser difícil por culpa de mi decisión de travestirme, pero estaba dispuesto a intentarlo. Llegué a su departamento con ansia y nerviosidad. Llamé a la puerta y ella abrió con una mirada seria. Me preguntó qué quería y yo le dije que deseaba hablar con ella. Ella aceptó y me hizo pasar. Yo expliqué todo lo que había sucedido y le conté sobre mi experiencia. Ella escuchaba atentamente sin decir palabra. "¿Por qué decidiste hacer eso?", me preguntó ella después de que yo terminara mi explicación. "No lo sé", respondí yo. "Simplemente me sentía aburrido con mi vida y decidí probar algo diferente." "¿Te gustó?", preguntó ella curiosa. "Sí", respondí yo. "Me gustó mucho." "Eso es interesante", dijo ella pensativa. "Yo siempre te vi como un hombre muy tradicional....

Perdiendo a mi novia 9

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  Después de varios días de interminables penetraciones, yo apenas podía caminar. El dolor en mi culo era insoportable, y cada paso me causaba dolor intenso. Decidí pedir un descanso a Luca, ya que no creía poder soportar mucho más. Luca sonrió pícaramente al escucharme y me dijo que lo pensaría. Me ordenó que fuera a maquillarme y a la tarde estuviera lista para recibir clientes, que no me penetrarian analmente. Yo estaba preocupado por lo que podría hacer Luca, pero decidí confiar en él. Me aquille, peine mi peluca, me pinte las uñas, me puse pestañas, esperando su respuesta pero listo para complacerlo. Esa tarde llego con una sonrisa ancha y me dijo que tenía una sorpresa para mí. Me llevó a una habitación vacía, con solo una mesa y una cámara en el centro. Me ordenó que me acostara en la mesa con las piernas abiertas. Yo temblaba de miedo, pero no podía hacer nada para detenerlo. Luca se fue a buscar algo mientras yo esperaba con ansia a ver qué sería aquella sorpresa. Regresó ...

Perdiendo a mi novia 8

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Después de aquella primera noche, apenas dormí. Los pensamientos de mi situación me atormentaban. Al final, me levanté y comencé a maquillarme, intentando ser lo más femenino posible. Claudia se rió al verme y me dijo que tenía una sorpresa para mí. Me llevó ante la cámara y comenzó a maquillarme con esmero. Eligió un tono de base claro y lo extendió por mi rostro, ocultando mis rasgos masculinos. Con sombra de ojos azul y lápiz de labios rojo intenso, me convertí en una verdadera mujer en apariencia. Claudia se rió de gusto y me dio un abrazu fuerte. Me llevó a una habitación y me mostró un vestido negro ceñido con medias transparentes. Me dijo que Luca había invitado a dos amigos para que disfrutaran de la noche con nosotros. Yo estaba asustado, pero no podía hacer nada al respeto. Me vestí como me ordenaron, sintiendo cómo el vestido ajustado se ceñía a mi cuerpo. Claudia entró unos minutos después con dos hombres desconocidos. Eran amigos de Luca y habían pagado una buena cantidad ...

Perdiendo a mi novia 7

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Relato de un macho queriendo ser sissy

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Perdiendo a mi novia 4

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La semana siguiente fue una locura. Luca tenía una sorpresa preparada para mí, y yo notaba cómo Claudia estaba al tanto de algo grande. Me llevaron a casa de Luca, y la curiosidad me comía por dentro. Notaba sus risitas cómplices mientras caminábamos, y mi imaginación volaba sin freno. Me sentaron en un sillón. Claudia, sonriéndome con malicia, se fue a cambiar y volvio vestida con un body negro ajustado que resaltaba sus curvas peligrosamente. Luca, por su parte, tenía una expresión dominante en el rostro. Me dijo que había sido una buena chica y que había decidido recompensarme por mi sumisión. Quería que notara cuánto había disfrutado teniéndome a su merced, y que tenía algo especial preparado para mí. Me miró de arriba abajo con sorna y comenzó a reírse. Dijo que era hora de que conociera a la verdadera mujer de la casa, y que yo sería su esclava por un día. Claudia se acercó y me besó con lujo de detalles. Su lengua juguetona me hacía gemir, mientras sus manos expertas se adentrab...

Transformo a su marido en su putita

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  Elena siempre había sido una mujer un tanto peculiar, con gustos que muchos considerarían extraños. Por suerte, tenía un marido que la apoyaba en todas sus aficiones, aunque algunas fueran un tanto atípicas. Una tarde, tras una dura jornada laboral, tuvo una idea que no podía sacarse de la cabeza. Se dirigió al armario de su marido, Juan, y comenzó a revivirlo todo. Sacó sus mejores galas, las que solo se ponía en ocasiones especiales. Empezó por afeitarle las piernas y los brazos, dejándolos suaves al tacto. Luego pasó a maquillarle la cara, usando una base para igualar su tono de piel y ocultar cualquier impureza. Le delineó los ojos con cuidado, resaltando su mirada, y le puso un rojo pasión en los labios que le quedabafantástico. No podía faltar un buen manicura, así que se dedicó a pintarle las uñas de las manos y los pies con esmalte color rosa chicle. Quería que estuviera perfecto de la cabeza a los pies. Una vez listo, le ayudó a ponerse un vestidito negro, ajustado y cor...

Roberto y Luciana

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Roberto y Luciano eran dos amigos de la infancia, siempre habían estado unidos por un lazo inquebrantable. Un día, mientras estaban en casa de Roberto, este tuvo una idea un tanto peculiar. —Oye, Lu, tengo una cosa que quiero que hagas por mí, es una especie de fantasía que siempre he tenido...—dijo con voz seductora, apoyándose en el marco de la puerta— Me gustaría que te vestieras con la ropa interior de tu hermana y que te maquillaras como si fueras una chica. Luciano se quedó pensando unos segundos, dudoso ante la propuesta de su amigo. Pero su curiosidad y confianza en Roberto eran mayores, así que aceptó. Juntos se dirigieron al dormitorio de la hermana de Luciano, abrieron el armario y Roberto ya sentia una el comienzo de una ereccion mientras buscaba entre las tangas de la hermana de su amigo. Al fin eligio una sexy lingerie color rosa chicle. Luciano se sintió extraño poniéndose aquellas prendas, pero la curiosidad le animaba a seguir adelante. Se desnudo y  Roberto le ayu...

Pegging - Mónica (42) y Alfredo (23)

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  Mónica tomó la lencería rosa y se acercó a Alfredo con una sonrisa seductora en su rostro. "Ven aquí, cierra los ojos y deja que yo me encargue", le susurró al oído mientras le acariciaba la mejilla. Alfredo cerró los ojos y se dejó llevar por la sensación de la tela suave y sedosa deslizándose sobre su piel. Mónica lo ayudó a ponerse el sostén, ajustándolo cuidadosamente para que se adaptara perfectamente a su torso. Luego, le pidió que se diera la vuelta para poder ponerle las braguitas. Alfredo obedeció, sintiendo el roce de la tela contra sus nalgas mientras Mónica las subía por sus piernas y las ajustaba a su cintura. Finalmente, Mónica tomó un par de medias de encaje rosa y las desenrolló suavemente, deslizándolas por las piernas de Alfredo y ajustándolas cuidadosamente a sus muslos. "¡Listo! Ahora siéntete sexy y disfruta", le dijo Mónica mientras le daba un pequeño empujón para que se diera la vuelta y se mirara en el espejo. Mónica tomó una paleta de somb...

Alejandra ya no es Alejandro - 6 -

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 Los tres se adentraron en el bosque, caminando juntos mientras disfrutaban de la frescura del aire y la belleza de la naturaleza. Finalmente, llegaron a la cascada y al estanque de agua cristalina que habían oído hablar. Sin pensarlo dos veces, se quitaron la ropa y se sumergieron en el agua, sintiendo la frescura en su piel y la intimidad entre ellos. Alejandra se acercó a Lucia y la besó suavemente, mientras Diego las abrazaba a ambas. Los tres se acariciaban con ternura y disfrutaban de la belleza del momento. Después de un rato, salieron del agua y se sentaron en una roca cerca de la cascada. Lucia se apoyó en Diego mientras Alejandra le acariciaba la espalda. "Esto es tan hermoso", dijo Lucia, "nunca había sentido algo así". Los tres se miraron a los ojos y se besaron con pasión, dejándose llevar por el momento y la pasión que los unía. Luego, Alejandra tomó la mano de Lucia y la llevó detrás de la cascada. Allí, Alejandra acarició el cuerpo de Lucia y le susu...

Alejandra ya no es Alejandro - 5 -

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 Villa La Angostura, Argentina, Alejandra, su novia Lucia y su novio Diego estan mirando diseños y discutiendo cuál será el tatuaje que se harán. "Me encanta la idea de hacernos el mismo diseño," dijo Alejandra mientras revisaba las opciones. "¿Qué les parece un conjunto de corazones en el pie?" Lucía y Diego sonrieron y estuvieron de acuerdo con la idea. Se sentaron juntos en una esquina de la tienda, esperando a que el artista del tatuaje preparara el diseño. Después de unos minutos, el tatuador los llamó a cada uno para comenzar a tatuar los corazones en sus pies. Primero fue Diego, quien tomó asiento y se preparó para el dolor del tatuaje. Alejandra y Lucía lo observaban con una mezcla de admiración y ternura. "Vamos, Diego, no te rindas", dijo Alejandra con una sonrisa alentadora mientras acariciaba suavemente su brazo. Después de Diego, fue el turno de Alejandra, quien se sentó y se preparó para el tatuaje. Lucía no pudo evitar mirarla con admiración...

Alejandra ya no es Alejandro - 4 -

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  Alejandra llegó temprano a la clase de yoga y se sentó en su estera, estirando su cuerpo mientras esperaba a que las demás llegaran. De repente, vio a Lucia entrar en la habitación y su corazón comenzó a latir con fuerza. Lucia llevaba puesto un top ajustado que dejaba ver sus pechos y unos leggings negros que realzaban su figura. Hola, Alejandra -saludó Lucia con una sonrisa coqueta mientras se acercaba a su estera-. ¿Cómo estás? Hola, Lucia -respondió Alejandra, sonrojándose levemente-. Estoy bien, gracias. Lucia se sentó en la estera junto a Alejandra y comenzó a estirar. Durante toda la clase, Alejandra no podía apartar sus ojos de Lucia. Sus movimientos eran tan elegantes y sensuales que la dejaban sin aliento. Después de la clase, Alejandra se acercó a Lucia y comenzaron a conversar. Me encanta la clase de hoy -dijo Alejandra, sonriendo tímidamente-. Eres una excelente profesora. Gracias, Alejandra -respondió Lucia, con una sonrisa seductora-. Me alegra que hayas disfrutado...