Perdiendo a mi novia 5
Un par de semanas más tarde, Claudia y Luca tenían una nueva sorpresa preparada para mí. Me dijeron que tenían un invitado especial y que sería una noche inolvidable. Claudia me vistio con lenceria y una blusa con minifalda, me pinto las uñas, me maquillo y me puso la peluca. Me llevo al living de Luca con los ojos cerrados, y cuando abrí los ojos, vi a un hombre obeso, barbudo y peludo como un oso sentado en el sofá de Luca. Parecía ansioso por lo que vendría después, y una sonrisa lasciva se extendía por su rostro. Me presentaron como la "esclava sexual" y me ordenó que le complaciera. Yo estaba aturdido y un poco asustado, pero Claudia se acercó y me susurró que sería una oportunidad única de demostrar mi valía. Luca sacó una cámara y la acomodo en un tripode. Me dijo que querían grabarlo todo, para tener un recuerdo del evento. Yo me sonrojé de vergüenza, pero Claudia me aseguró que sería divertido. El hombre se quitó la camisa, mostrando un torso peludo que contrastaba c...