Alejandra va al ginecologo
Alejandra llegó al consultorio del ginecólogo temprano en la mañana. Había estado sintiendo algunas molestias en sus senos y decidió que era mejor prevenir que lamentar. Al saludar al doctor, notó que era un hombre joven y apuesto, lo que la hizo sentir un poco incómoda, pero decidió que tenía que ser valiente y seguir adelante con la consulta. El médico comenzó con un examen mamario, presionando suavemente los senos de Alejandra y palpando para detectar cualquier anormalidad. Ella se sintió un poco nerviosa al principio, pero pronto se relajó al darse cuenta de que el doctor era muy profesional. "¿Sientes alguna molestia o dolor cuando te presiono aquí?", preguntó el médico mientras le presionaba el área del pezón. "No, no siento dolor, pero sí siento una sensación extraña", respondió Alejandra. El médico continuó con el examen de los pezones, revisando su sensibilidad y aspecto. A Alejandra le resultó un poco incómodo, pero no podía evitar sentir un cosquilleo en