sexycuentos

 Ivonne y yo llevamos 3 años de novios, ella tiene 25 y yo 28, mis cuernos empezaron al principio de la relación, ella siempre fue muy promiscua y le gustaba juntarse con mis amigos y se la garchaban, cuando yo lo descubría me enojaba mucho, pero siempre la terminaba perdonando. Cada nueva infidelidad que descubría y la perdonaba más puta se comportaba después, hasta que dejé de reclamarle porque no iba cambiar lo puta que era mi novia y yo sabía que siempre la iba a perdonar. Ahora cada vez está más puta que nunca, hace un mes me recomendó ir a un restaurante, que para mi sorpresa era manejado por Roberto uno de los tipos que se la andaba cojiendo, ella iba con un vestido plateado que dejaba que se marquen sus nalgas, mirarla caminar desde atrás era hipnotizante. Yo pensaba al fin tendría una cena tranquila con mi novia sin tener que ver preocuparme de me la lleven a cojersela, pero al apenas entrar ya me di cuenta que no sería así. Al ver a roberto,un tipo de 1,90 aprox ella lo salud

  La otra vez hicimos un asado entre amigos y no llevé a Ivonne para que no me la cojan entre todos de nuevo, sólo quería pasar un rato tranquilo con mis amigos, comer asado, tomar unas cervezas con ellos sin que el tema principal sean mis cuernos y las cojidas continuas que le dan a mi novia. Estabamos bien tranquilos, me hacían los chistes de siempre, que donde esta Ivonne, que si la deje con otros machos de camino, o que me estan preparando el postre en la concha de mi novia, será gracioso para ellos pero suele ser verdad todo eso. Pero traté de cambiar de tema y seguimos hablando de las boludeces que suelen hablar, que fútbol, que messi, que cryptomonedas, teorias conspirativas que parecieran ser hechas por drogadictos etc etc etc Estabamos todos reunidos y me escribe Ivonne, mi novia quería que la lleve a casa de su compañero de la facu porque tenia que estudiar para una prueba, sí, sábado 23hs, a estudiar con su compañero, y encima me pide que la lleve Ivonne: Amoor -(cuando nece

  Antes de comenzar relatar lo vivido con mi novia, paso a detallarles un poco nuestra relación. Somos una pareja que convive hace dos años, ella tiene 25 y yo 26 años, ambos somos de Uruguay, pero vivimos en Argentina. Desde que vivimos juntos solemos poner la casa para las previas con amigos antes de ir a fiestas. Esto que les voy a contar pasó en diciembre del año pasado. Estábamos esperando a que lleguen nuestros amigos, yo estaba ordenando el living, poniendo vasos, acomodando juegos que solemos jugar y chequeando la música. Ella se encontraba cambiándose en el cuarto. Cuando sale, quedé completamente sorprendido. Tenía puesto un vestido negro que le quedaba muy ajustado, dejando al descubierto sus hermosas piernas blancas y marcaba su enorme culo. No me aguanté y fui a besarla mientras le apretaba todo el culo. Luego de solo besos, nos pusimos a tomar unos tragos y a comer algo mientras conversábamos. Unos minutos más tarde llegan nuestros amigos y amigas, entre ellos Isaías, qui

  Desde hace muchos años empezamos con primeras frases calientes mientras cogíamos. En plena calentura siempre le preguntaba si quería dos pijas, o estar rodeada de pijas o meterle los dedos en la boca o en el culo mientras la cogía. A todo ella, en caliente respondía que sí. Después de pasada la calentura todo bajaba y ella me decía que era solo para calentarnos en ese momento. Pero el tiempo pasó y la confianza aumentó. Ahí se abrió más y me confesó que siempre le calentó mucho la idea de pensar estar con tipos a la vez, o tres. Que se tocaba pensando que la cogían dos tipos después de una fiesta y cosas así. Hasta confesarme también que en algún momento estando sola se metió en la bañera con dos juguetes de los que tenemos y se metió uno por adelante y otro, más chiquito, por atrás. Se imaginarán que cada una de esas confesiones desencadenaba un garche hermoso, muy caliente y a la vez, que eso subía aún más la vara de fantasías y ganas de concretarlas. Así seguimos hasta que empecé

Antes que nada, agradecer por esos relatos anteriores que invitamos a leer, pero adelantarles una seguidilla de relatos reales que se vienen dando desde hace un tiempo hacia aca y que por ahi ayuden a otras parejas que buscan lo mismo... Hace un par de años hasta ahora, más allá de las situaciones morbosas a las que Gise estaba dispuesta siempre y que hemos disfrutado y cada tanto surgían, empezó a rondarla idea de conectar más allá de lo sexual con alguien, lo que generaría que las situaciones sociales potenciaran las sexuales. Claramente empezamos a proponer que salga sola, primero cenas y luego telos, de a poco aceptar invitaciones a casas donde había de por medio una cena y ver una peli o una serie, o simplemente juntarse a charlar donde sea sin nada sexual de por medio. Esto potencio mucho el morbo porque genero expandir más allá de lo real a la imaginación en las situaciones posibles que se pudieran dar, proyectarlas, y mi rol siempre fue tratar de que ella las imagine, se imagin

Me desperté en la cama junto a Diego y decidimos ir a la cocina para ver si Bernardo necesitaba ayuda con la cena. Al entrar en la cocina, encontramos a Bernardo en lencería, pero con un delantal rosa puesto, preparando una deliciosa cena. Los aromas de la comida me atrajeron y no pude evitar sonreír. "¿Necesitas ayuda, amor?", pregunté mientras me acercaba a él. "No, ya casi estoy terminando", respondió él mientras me sonreía. Diego se acercó por detrás, desnudo, apoyando su gran pene en su cola entangada y acarició la espalda de Bernardo. "Huele delicioso", dijo, olfateando el aire. Bernardo sonrió. "Gracias, espero que les guste", dijo mientras se daba cuenta de que todavía llevaba puesto el delantal. Me sentía feliz y agradecida de tener a alguien como Bernardo en mi vida, alguien que era lo suficientemente valiente para explorar su lado femenino y compartirlo con Diego y conmigo. No pude evitar sonreír ante la imagen de mi esposo en lencería

Estaba emocionada por la idea de ayudar a Bernardo a explorar su lado femenino, así que juntos fuimos de compras y buscamos algunas piezas clave para su guardarropa. Encontramos algunos vestidos de verano ligeros y femeninos, así como un par de blusas y pantalones de corte suave y fluido. También compramos algunos cosméticos básicos, como base de maquillaje, rubor y pintalabios. Una vez de regreso en casa, Bernardo se divirtió probándose diferentes looks mientras yo lo alentaba y le daba consejos. Descubrimos que le gustaba el maquillaje natural, con un toque de brillo en los labios, y los vestidos sueltos que realzaban sus curvas de una manera suave y elegante. Juntos experimentamos con diferentes peinados, desde una coleta hasta un suelto despeinado, y finalmente decidimos que una media coleta era perfecta para Bernardo. Estábamos emocionados por mostrarle a Diego los nuevos atuendos que habíamos elegido, así que lo recibimos en la habitación vestidos con nuestras lencerías favoritas

  Bernardo y yo llegamos primero al hotel, emocionados por pasar una noche juntos en un lugar nuevo y emocionante. Mientras esperábamos a que Diego   llegara, exploramos el lobby y las áreas comunes del hotel, admirando la elegante decoración y las vistas panorámicas desde las ventanas. Finalmente, Diego llegó y nos unimos para hacer el check-in y dirigirnos a nuestra habitación.  Una vez dentro, nos sorprendió la lujosa decoración y la vista impresionante desde la ventana. Nos sentimos como en un sueño. Bernardo y yo fuimos a vestirnos con la lenceria que trajimos especialmente. Bernardo y yo habíamos elegido lencería a juego de encaje negro, con detalles en dorado. Un conjunto de sujetador y tanga, con un delicado encaje floral que cubría las copas y un lazo de satén en el centro. Las tangsa tenían detalles de encaje en la parte delantera y trasera, y un pequeño lazo en la cintura. "Bueno, bueno, bueno. ¡Miren lo hermosos que lucen juntos!", exclamó Diego con una sonrisa mi

  Al día siguiente, Bernardo y yo nos despertamos en la cama, sintiéndonos renovados y rejuvenecidos. Sabíamos que habíamos hecho algo especial y nos sentíamos aún más conectados y apasionados. "¿Te gustó la experiencia de anoche?" Preguntó Bernardo, mientras se acurrucaba a mi lado. "Me encantó", respondí con una sonrisa. "Fue una de las cosas más increíbles que he experimentado". "Me alegra que hayas disfrutado. Me hizo muy feliz verte tan feliz", dijo Bernardo, acariciando mi cabello. "¿Y tú? ¿Cómo te sentiste?" Pregunté. "Me sentí muy emocionado y conectado contigo y con Diego. Me encanta cómo te veías tan hermosa y sexy", respondió Bernardo, mirándome con intensidad. "¡Ay, Bernardo, no me hagas sonrojar!" Me reí mientras me acomodaba en la cama. "¿Crees que podríamos hacerlo de nuevo?" "¡Por supuesto! Pero solo si te sientes cómoda y lista para ello", dijo Bernardo, besando mi cuello suavemen

Ese mismo dia. cada uno a trabajar, y nos mensajeábamos todo el día, yo pensando a lo primero haber como lo tomaba ella, ya veo me decía.. perdón me equivoque, me deje llevar por el alcohol, pero nada que ver, todo lo contrario, me dijo que nunca lo había hecho en un auto, quedamos en vernos a la noche,  A la noche fuimos a mi casa, cenamos y fuimos a mi pieza, nos llenamos de besos La fui desnudando despacio, y besando cada parte de su cuerpo. besos en la boca, cachetes, cuello, pechos enormes, brazos, (ella gemía demasiado) pansa, y bajé a su conchita, le di unos besos y lengüetazos al rededor de su conchita, bajé por sus hermosas piernas, hasta la rodilla, voy subiendo y cuando llego de nuevo a su conchita es como q vuelvo a sentir q se incomoda, le pregunto.... y me dice q nunca le habían echo eso, y empecé a darle mimos a su clítoris, lo chupaba todo, mientras me prendía por sus pechos, no daba mas ella, le meto un dedo en su conchita y voy a su cola y me quita la mano, me pide q

Buenas tardes, esto que voy a contar pasó hace mas de 10 años, yo trabajaba en un telecentro y camino al mismo, me cruzo con una chica morocha alta, super tetona y culona, hermosa linea, paro y le digo que hermosa que sos, ella me mira y se ríe nomas como a las 2 horas de estar trabajando salgo a la calle a tomar unos teres y me cruzo con un conocido, me cuenta que esta esperando a una chica y le cuento que trabajo aca, y q pase cuando quiera asi nos poníamos al día, ya que hacia bastante tiempo no hablábamos. Al otro día entra el y atrás entra esta chica, se me paró el corazón, yo dije entra a ocupar una cabina telefónica, pero no, estaba totalmente equivocado, ella venia con el y me dice te presento a mi novia nos pusimos a charlar y yo no sabia q hacer porque ella se reía, pasaron los dias y venían siempre. Hasta que ella empezaba a venir mas temprano que de costumbre y hablábamos y hablábamos, me preguntaba si le gustaba su perfume y yo me acercaba y le olía y le decía que rico por