Pegging - Nicolás y florencia
Nicolás se acercó al armario y buscó entre su ropa interior hasta encontrar un conjunto de encaje negro que había comprado hacía algunos días. Se lo puso con un poco de timidez, ajustando el sujetador y las braguitas para que quedaran bien puestos. Luego, se acercó a Florencia y le preguntó: "¿Te gusta cómo me queda?".
Florencia lo miró con una sonrisa y asintió. "Te ves hermoso, Nicolás. Me encanta que te sientas cómodo y atrevido para probar cosas nuevas", respondió ella mientras le daba un beso en los labios.
Nicolás sonrió, sintiéndose un poco más confiado. "Gracias, Florencia. Estoy emocionado de probar esto contigo", dijo mientras se acomodaba la lencería.
Florencia sonrió y se acercó a él, acariciando suavemente su rostro. "Me alegra que estés disfrutando esto, amor", dijo ella. "Me encanta que estés abierto a experimentar cosas nuevas conmigo".
Nicolás la miró con ternura y deseo, sintiendo su corazón latir más rápido en su pecho. "Siempre estoy dispuesto a probar cosas nuevas contigo, Florencia", dijo él mientras la tomaba de la cintura y la acercaba a él. "Eres la persona más importante en mi vida y quiero hacerte feliz".
Florencia se estremeció ante sus palabras y lo besó con pasión, sintiendo la excitación crecer dentro de ella. "Lo eres todo para mí, Nicolás", dijo ella cuando se separaron. "Vamos a disfrutar de esta noche juntos".
Nicolás asintió con la cabeza y se tumbó en la cama, esperando a que Florencia se colocara el cinturón con el dildo.
Tienes razón, antes de la penetración es importante asegurarse de que Nicolás esté suficientemente lubricado para evitar cualquier tipo de dolor o incomodidad. Florencia lo llevó a la cama y lo tumbó boca arriba, tomando un poco de lubricante de una botella que había preparado previamente.
"Necesitamos asegurarnos de que estés cómodo", dijo ella mientras vertía el lubricante en su mano. "Solo dime si algo duele o es incómodo, ¿de acuerdo?"
Nicolás asintió con la cabeza, sintiendo cómo la mano de Florencia se deslizaba suavemente sobre su cuerpo. Florencia se centró en su culito, asegurándose de que estuviera bien lubricado antes de comenzar la penetración.
"¿Te sientes bien, Nicolás?", preguntó ella mientras acariciaba suavemente su pene.
Nicolás gemía suavemente, disfrutando de las caricias y la atención de su pareja. "Sí, me siento bien", respondió él. "Sigue adelante".
Florencia sonrió y se colocó el cinturón con el dildo, acercándose a Nicolás con una sonrisa juguetona. "¿Estás listo para esto?", preguntó ella mientras se colocaba encima de él.
Nicolás asintió con entusiasmo, emocionado por la experiencia que estaba a punto de tener con su pareja. "Sí, estoy listo", respondió él con una sonrisa.
Florencia comenzó a acariciar suavemente su cuerpo, admirando su lencería femenina mientras le besaba el cuello. "Te ves tan sexy, Nicolás", susurró ella. "Me encanta que estés dispuesto a probar cosas nuevas conmigo".
Nicolás sonrió, sintiéndose cómodo y confiado en su propia piel. "Gracias, Florencia", dijo él mientras acariciaba su cabello. "Estoy emocionado de probar esto contigo".
Florencia asintió y tomó un poco de lubricante, aplicándolo cuidadosamente sobre el dildo. "Vamos a asegurarnos de que esto sea lo más cómodo posible para ti", dijo ella mientras acariciaba suavemente su miembro.
Nicolás se estremeció ante el contacto, disfrutando de la sensación de las manos expertas de Florencia. "Eres tan buena en esto", dijo él mientras gemía de placer.
Florencia sonrió y comenzó a deslizar el dildo dentro de él, asegurándose de ir despacio y ser cuidadosa en todo momento. Nicolás se estremeció ante la penetración, sintiendo la excitación crecer dentro de él a medida que ella lo follaba con el dildo.
Nicolás cerró los ojos y dejó escapar un gemido de placer mientras Florencia lo penetraba con el dildo. Sus manos se aferraron a las sábanas mientras se dejaba llevar por el placer que ella le estaba dando.
"Florencia, esto es increíble", dijo Nicolás entre jadeos. "Nunca había sentido algo así antes."
Florencia sonrió mientras seguía moviéndose dentro de él. "Me alegra que te esté gustando, cariño", dijo ella. "Quiero que disfrutes al máximo esta experiencia."
Nicolás asintió con la cabeza, sin poder articular palabras debido al placer que estaba sintiendo. La sensación de estar siendo penetrado por Florencia era indescriptible y estaba seguro de que nunca la olvidaría.
Florencia aceleró el ritmo y Nicolás arqueó la espalda, dejando escapar un gemido más fuerte. La excitación en su cuerpo era incontrolable y sentía que estaba a punto de explotar de placer.
"Florencia, no puedo aguantar más", dijo Nicolás, su voz llena de deseo.
Florencia asintió y sacó el dildo, ayudando a Nicolás a liberarse de la lencería femenina. Ambos se quedaron acostados en la cama, respirando con dificultad mientras se recuperaban del intenso momento que acababan de compartir.
Nicolás se volvió hacia Florencia y la abrazó, agradecido por la increíble experiencia que acababan de vivir juntos. Sabía que nunca olvidaría esa noche y estaba emocionado por explorar más cosas nuevas con ella en el futuro.
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