La alumna puta 1

Profesor Gerardo: Ceci, quiero que te arrodilles frente a mí, ahora mismo.

Ceci: Sí, profesor Gerardo. se arrodilla obedientemente

Profesor Gerardo: Muy bien, ahora quiero que te toques a ti misma, acaricia tu cuerpo siguiendo mis indicaciones.

Ceci: con voz suave y sumisa Sí, profesor Gerardo. comienza a acariciarse lentamente

Profesor Gerardo: Fantástico, Ceci. Continúa, pero hazlo más intensamente. Quiero que te entregues por completo a tus sensaciones.

Ceci: susurra excitada Sí, profesor Gerardo. aumenta el ritmo de sus caricias

Profesor Gerardo: Ahora, quiero que me brindes estimulación oral. Quiero sentir tu boca y tu lengua en mí.

Profesor Gerardo: con voz profunda y dominante Ahora, quiero que me brindes estimulación oral. Quiero sentir tu boca y tu lengua en mí.

Ceci: su respiración se acelera, pero obedece sin titubear Sí, profesor Gerardo. se arrodilla frente a él, sintiendo cómo la sumisión se apodera de su ser

Profesor Gerardo: observándola con intensidad Muy bien, Ceci. Comienza suavemente, recorre mi cuerpo con tus labios y tu lengua. Excítame con cada movimiento.

Ceci: lentamente acerca su rostro a la entrepierna del profesor Gerardo, sintiendo la anticipación y el deseo Sí, profesor Gerardo. con delicadeza, roza sus labios contra su miembro, dejando que su lengua explore cada centímetro

Profesor Gerardo: gimiendo levemente Así, Ceci. Continúa, no te detengas. Muéstrame tu entrega, tu habilidad para satisfacerme.

Ceci: envolviendo su miembro con su boca, lo acaricia con su lengua, aplicando una presión perfecta y alternando entre succiones suaves y rápidas

Profesor Gerardo: entre suspiros de placer Eres una buena alumna, Ceci. Sigues mis instrucciones a la perfección. Sigue así, no pares.

Ceci: continúa con mayor intensidad, entregándose por completo a la tarea que se le ha encomendado Sí, profesor Gerardo. Haré todo lo posible para satisfacerle.

Profesor Gerardo: con voz ronca y llena de deseo Eres muy talentosa, Ceci. Tu boca se siente increíble alrededor de mi miembro. Sigue así, no pares.

Ceci: mientras lo estimula con habilidad Gracias, profesor Gerardo. Es un honor poder brindarle placer. Estoy aquí para servirle.

Profesor Gerardo: tomando el control, acaricia el cabello de Ceci Eres mi alumna más dedicada, Ceci. Me has demostrado una obediencia ejemplar. Ahora, quiero que aumentes la intensidad. Quiero sentirte más profundamente.

Ceci: obedeciendo sus deseos, incrementa el ritmo y la presión, hundiéndose más en su boca y explorando nuevas zonas de excitación

Profesor Gerardo: gimiendo con fervor Sí, eso es, Ceci. Hazlo más intenso. Me estás llevando al límite. Eres una verdadera sumisa.

Ceci: entregada por completo, sus ojos llenos de lujuria Soy suya, profesor Gerardo. Haga conmigo lo que desee. Mi placer está en su satisfacción.

Profesor Gerardo: entre gemidos y respiración agitada Eres una verdadera experta, Ceci. Nadie ha logrado estimularme así antes. Estoy cerca... muy cerca.

Ceci: con determinación y pasión No se contenga, profesor Gerardo. Permítame llevarlo al clímax. Es mi deseo brindarle el máximo placer.

Profesor Gerardo: en el umbral del éxtasis Sí, Ceci. No puedo resistirme más. ¡Ahora!

Ceci intensifica sus movimientos, llevando al profesor Gerardo al clímax de un estallido de placer. El profesor se desvanece en la ola de sensaciones, dejándose llevar por la dulce rendición que Ceci le ofrece.

Profesor Gerardo: entre jadeos Eres asombrosa, Ceci. Me has llevado al paraíso. Gracias por brindarme este placer incomparable.

Ceci: con una sonrisa cálida y satisfecha Es un honor servirle, profesor Gerardo. Mi propósito es cumplir sus deseos y hacerle sentir completo.

Ambos se toman un momento para recuperar el aliento, sumergidos en la intensidad del momento. A medida que la excitación se desvanece, una complicidad y conexión especial los envuelve. En su juego de dominación y sumisión, encuentran un espacio de libertad y entrega mutua.

Profesor Gerardo: acariciando el rostro de Ceci con ternura Eres única, Ceci. Me has mostrado un mundo de placer y entrega que nunca antes había experimentado. Estoy agradecido por tu dedicación y valentía.

Ceci: recibiendo sus caricias con gratitud Gracias, profesor Gerardo. Esta experiencia ha sido transformadora para mí también. Estoy lista para continuar explorando nuestras fantasías juntos.